El agua es un recurso vital para el consumo del ser humano y es fundamental para actividades industriales, de producción agrícola entre otros ámbitos. Cerca de un millón de personas mueren anualmente a causa del agua insalubre, ya que esta puede estar contaminada tanto química como biológicamente. Muchos de estos contaminantes nocivos son indetectables a simple vista, lo que potencialmente permite que se ingieran sin siquiera notarlos. Es por esto que es primordial asegurar el correcto tratamiento y la construcción de infraestructura que facilite este acceso seguro al agua potable. 

La región del Medio Oriente y África del Norte enfrenta una precaria disponibilidad de recursos hídricos, esta región se ve especialmente afectada por el calentamiento global, lo que incrementa la frecuencia y gravedad de sequías. La organización metereológica mundial estima que al ritmo actual, el calentamiento global llevaría a que un 80% de los países africanos sufran escasez de agua para 2030. Adicionalmente, en múltiples conflictos,  como el visto entre Israel y Palestina, se ha visto una distribución inequitativa de agua junto con ataques a fuentes de abastecimiento hídrico. Esto pone en peligro el acceso a servicios básicos de millones de personas y aumenta el peligro de una potencial guerra por agua. 

Este comité buscará encontrar soluciones que permitan a las naciones de esta región instalar infraestructura y tener acceso seguro a fuentes de agua potable. También se considerarán las implicaciones del cambio climático y las dificultades para asegurar la salubridad del agua. Adicionalmente, se considerará el riesgo de ataques a suministros hídricos y el peligro de conflictos por acceso a recursos hídricos.